Artículo de información
José Carlos Botto Cayo y Abel Marcial Oruna Rodríguez
27 de junio del 2024
Aristóteles es considerado uno de los filósofos más influyentes en la historia del pensamiento occidental. Sus contribuciones abarcan una amplia gama de disciplinas, incluyendo lógica, metafísica, ética y política. Inicialmente estudiante en la Academia de Platón, Aristóteles desarrolló posteriormente su propio enfoque filosófico. Este se caracterizó por un énfasis en la observación empírica y el razonamiento lógico, un método que combinaba la investigación práctica con el análisis teórico. Su trabajo estableció nuevos estándares en la filosofía griega y tuvo un impacto duradero en el desarrollo del método científico.
La fundación del Liceo por Aristóteles marcó un hito importante en la historia de la educación y la investigación. En esta institución, conocida también como la escuela peripatética, Aristóteles no solo impartía enseñanzas, sino que fomentaba un ambiente de investigación colaborativa. Sus obras sobre lógica proporcionaron herramientas fundamentales para el razonamiento y la argumentación. En ética, exploró conceptos como la virtud y la felicidad, estableciendo un marco para la reflexión moral. Su trabajo en política examinó diferentes formas de gobierno y la naturaleza de la ciudadanía, influyendo significativamente en el pensamiento político posterior. Además, sus investigaciones en biología y física, aunque superadas por la ciencia moderna, demostraron un enfoque sistemático que fue crucial para el desarrollo posterior del conocimiento científico.
Los Primeros Años de Platón
Platón, uno de los filósofos más influyentes de la historia, nació en Atenas en el año 427 a.C. en el seno de una familia aristocrática. Su verdadero nombre era Aristocles, pero se le conoce por el apodo de Platón, que según algunas fuentes hace referencia a sus anchos hombros. Desde su niñez, Platón estuvo inmerso en un entorno cultural y político destacado, ya que su familia estaba estrechamente relacionada con figuras importantes de la vida ateniense, lo que le proporcionó una educación privilegiada y el acceso a un amplio espectro de ideas y conocimientos (Fénelon, 2022).
La educación de Platón fue meticulosamente diseñada, acorde con las tradiciones de su linaje. Estudió diversas disciplinas, desde la gimnasia y la música, hasta la gramática y la retórica. Sus primeras influencias intelectuales incluyen a Cratilo, un seguidor de Heráclito, y a otros maestros que le introdujeron en el pensamiento filosófico pre-socrático. Esta formación temprana sentó las bases para su posterior desarrollo intelectual, caracterizado por una búsqueda constante de la verdad y la justicia (Fénelon, 2022).
A lo largo de su juventud, Platón también fue testigo de la turbulenta situación política de Atenas, incluyendo la guerra del Peloponeso y la caída de la democracia ateniense a manos de los Treinta Tiranos, un régimen oligárquico del cual algunos de sus familiares formaban parte. Estas experiencias tuvieron un impacto profundo en su visión del mundo y su filosofía política, marcando el inicio de una vida dedicada a la reflexión sobre la mejor forma de gobierno y la naturaleza de la justicia (Fénelon, 2022).
La niñez y juventud de Platón estuvieron marcadas por una mezcla de privilegio y crisis, lo que le proporcionó una perspectiva única sobre los asuntos humanos. Estos primeros años fueron cruciales para el desarrollo de su pensamiento filosófico, el cual se consolidaría plenamente bajo la tutela de Sócrates, quien se convertiría en su maestro y la mayor influencia en su vida. La relación con Sócrates no solo le proporcionó una orientación intelectual, sino también un modelo de vida dedicado a la búsqueda incesante del conocimiento y la virtud (Fénelon, 2022).
Aristóteles como historiador y su enfoque de la historia política
Aristóteles, a pesar de ser reconocido principalmente como filósofo, también realizó importantes contribuciones al estudio de la historia, especialmente en el ámbito político. Su interés por la historia se evidencia en muchas de sus obras y es fundamental en la construcción de su sistema filosófico. Por ejemplo, el primer libro de la Metafísica es considerado la primera historia de la filosofía, donde Aristóteles recoge las opiniones más importantes sobre problemas filosóficos de autores anteriores a él (Rus Rufino, Madrid).
En el ámbito político, Aristóteles utilizó la historia como un elemento crucial para justificar sus ideas y planteamientos. Esto se refleja particularmente en dos de sus obras: la Política y La Constitución de Atenas. En estas obras, Aristóteles recurre frecuentemente a referencias históricas como argumento de autoridad para fundamentar sus reflexiones. Su enfoque de la historia se caracteriza por buscar explicar las causas de los acontecimientos y el desarrollo de las sociedades humanas, trascendiendo los límites locales y temporales (Rus Rufino, Madrid).
La Constitución de Atenas, única obra conservada de un ambicioso proyecto que buscaba recopilar información sobre todas las formas de estado y gobierno conocidas, muestra claramente el método histórico de Aristóteles. En ella, ofrece una exposición detallada de la evolución del régimen político de Atenas desde sus orígenes hasta su época, basándose en diversas fuentes como documentos originales, textos de historiadores anteriores, tradiciones orales y evidencia arqueológica (Rus Rufino, Madrid).
Para Aristóteles, la historia no era simplemente una narración de hechos pasados, sino una herramienta para entender el presente y fundamentar sus teorías políticas. Su aproximación a la historia se caracteriza por un método positivo y científico de observación, buscando explicar la realidad política tal como aparece ante la mirada del observador. Este enfoque se refleja en la Política, donde Aristóteles utiliza ejemplos históricos para analizar diferentes formas de gobierno y proponer soluciones a problemas políticos contemporáneos (Rus Rufino, Madrid).
La Concepción Aristotélica de la Memoria y el Tiempo
Aristóteles aborda la cuestión de la memoria de una manera que lo distingue claramente de su maestro Platón. En su tratado «De Memoria et Reminiscentia», parte de los Parva Naturalia, Aristóteles argumenta que la memoria está intrínsecamente ligada a la experiencia sensorial y al tiempo. Contrariamente a la visión platónica de una memoria trascendental de ideas eternas, Aristóteles insiste en que «la memoria es del pasado». Esta afirmación fundamental establece la temporalidad como una característica esencial de la memoria y del ser humano (Fernández Rodríguez, España).
Para Aristóteles, la memoria no es un simple almacén de imágenes o impresiones. Aunque reconoce la necesidad de una «huella» o impronta física para que exista la memoria, argumenta que esta huella por sí sola no constituye un recuerdo. La memoria implica la capacidad de reconocer la huella como representación de algo pasado. En sus palabras: «¿cómo, aun percibiendo la afección [la huella o impronta], recordamos aquello que no estamos percibiendo, es decir, lo ausente?». Esta pregunta revela la complejidad de la concepción aristotélica de la memoria (Fernández Rodríguez, España).
La teoría de Aristóteles sobre la memoria desafía las explicaciones mecanicistas o puramente físicas. Rechaza la idea de que la memoria pueda reducirse a asociaciones automáticas o a la mera persistencia de impresiones sensoriales. En cambio, propone una visión de la memoria como una facultad activa, íntimamente ligada a nuestra experiencia del tiempo. Esta perspectiva sugiere que la memoria no es solo un registro pasivo del pasado, sino una función dinámica que nos permite comprender nuestra existencia temporal (Fernández Rodríguez, España).
La concepción aristotélica de la memoria tiene implicaciones profundas para nuestra comprensión de la cognición y la conciencia humana. Al vincular la memoria con la temporalidad y la experiencia sensorial, Aristóteles establece las bases para una psicología naturalista que no requiere recurrir a explicaciones místicas o trascendentales. Su enfoque anticipa, en cierto modo, desarrollos modernos en psicología y neurociencia, que entienden la memoria como un proceso activo de reconstrucción más que como un simple almacenamiento y recuperación de información (Fernández Rodríguez, España).
Los últimos días del gran filósofo
En sus últimos días, Aristóteles se retiró a su villa en Calcis, en la isla de Eubea. Este retiro se produjo en un contexto de creciente tensión política en Atenas, donde el sentimiento antimacedonio estaba en aumento tras la muerte de Alejandro Magno. Aristóteles, conocido por sus conexiones con la corte macedonia, decidió abandonar la ciudad para evitar, según sus propias palabras, que «los atenienses pecaran dos veces contra la filosofía», haciendo referencia a la ejecución de Sócrates décadas antes (Mark, 2019).
Durante este período final, Aristóteles continuó con sus investigaciones y escritos, aunque con un ritmo más pausado. Se cree que dedicó gran parte de su tiempo a organizar y revisar sus obras, preparándolas para la posteridad. También se especula que pudo haber sufrido de problemas de salud crónicos, posiblemente relacionados con su avanzada edad y el desgaste de una vida dedicada al estudio y la enseñanza (Mark, 2019).
Las circunstancias exactas de la muerte de Aristóteles siguen siendo objeto de debate entre los historiadores. Algunas fuentes sugieren que falleció debido a una enfermedad estomacal, mientras que otras apuntan a causas naturales relacionadas con la vejez. La teoría del envenenamiento, aunque popular, carece de evidencia histórica sólida. Lo que sí parece cierto es que Aristóteles murió en Calcis en el año 322 a.C., a la edad de 62 años (Mark, 2019).
Antes de morir, se dice que Aristóteles nombró a Teofrasto como su sucesor al frente del Liceo, la escuela que había fundado en Atenas. También se le atribuye haber dejado instrucciones para el cuidado de su familia y la disposición de sus bienes. Aunque los detalles específicos de sus últimos momentos son escasos, el impacto de su vida y obra en la filosofía y la ciencia occidentales ha perdurado a lo largo de los siglos, asegurando que su legado sobreviviera mucho más allá de su muerte física (Mark, 2019).
Referencias
Fénelon, F. (6 de Octubre de 2022). Torre de babel. Obtenido de Vida del filósofo griego Aristóteles: https://e-torredebabel.com/vida-del-filosofo-griego-aristoteles-fenelon/
Fernández Rodríguez, T. R. (España). Aristóteles, sobre la Memoria. Revista de historia de la psicología, Vol. 39, Nº 2, 7-13.
Mark, J. J. (22 de Mayo de 2019). World history encyclopedia. Obtenido de Aristoteles: https://www.worldhistory.org/trans/es/1-355/aristoteles/
Rus Rufino, S. (Madrid). Política e historia en Aristóteles. Historia y Política, núm. 17, 175-204.