Artículo de opinión
José Carlos Botto Cayo y Abel Marcial Oruna Rodríguez
16 de diciembre del 2023
Considerado una de las obras literarias más antiguas de la humanidad, el Poema de Gilgamesh data del tercer milenio antes de Cristo. Escrito originalmente en escritura cuneiforme sobre tablillas de arcilla, este extenso poema épico sumerio narra las aventuras y desventuras del legendario rey Gilgamesh de Uruk durante su búsqueda de la inmortalidad (Anonimo, 2016).
A través de una trepidante narrativa en verso que combina elementos fantásticos, heroicos y reflexivos, el Poema de Gilgamesh explora temas universales como el sentido de la vida y la muerte, el propósito del sufrimiento, la amistad y el amor. Considerada durante siglos la gran epopeya de Mesopotamia, esta joya literaria del Antiguo Oriente brinda un fascinante testimonio no sólo sobre la más remota Antigüedad, sino también sobre los anhelos, miedos y aspiraciones que han movilizado al ser humano desde el principio de los tiempos. En los siguientes párrafos profundizaremos sobre los episodios claves y mensajes de esta monumental obra.
La historia de Gilgamesh
La Epopeya de Gilgamesh es considerada una joya de la literatura universal no sólo por su antigüedad, sino por la profundidad de los temas existenciales que aborda. Este extenso poema, escrito originalmente en sumerio y acadio entre el 2000 y 1400 A.C. en Mesopotamia, nos ha llegado a través de tablillas de arcilla halladas en excavaciones arqueológicas en lo que hoy es Irak (Abusch, 2001).
El poema narra las heroicas aventuras del rey Gilgamesh de Uruk, un personaje histórico que gobernó hacia el 2600 A.C. En doce tablillas, describe la amistad entre Gilgamesh y el salvaje Enkidu, quienes unen fuerzas para derrotar al guardián del bosque Humbaba, entre otras hazañas. Pero cuando los dioses deciden matar a Enkidu, Gilgamesh emprende la búsqueda de la inmortalidad para escapar a su propio destino de muerte (Abusch, 2001).
El poema explora así temas universales que siguen resonando en nuestros días: la gloria y fragilidad humana, la dinámica entre civilización y naturaleza salvaje, y el anhelo por trascender nuestra mortalidad. Se le considera la primera gran obra literaria que plantea este tipo de inquietudes existenciales que definirían después toda la literatura occidental (Abusch, 2001).
Gilgamesh, el rey inmortalizado en el poema
Gilgamesh fue un personaje real, un rey que gobernó la ciudad de Uruk, en la antigua Mesopotamia, alrededor del año 2600 A.C. Se han encontrado relatos históricos que corroboran su existencia como monarca durante la dinastía inicial de Uruk de la historia sumeria. El poema lo describe como: “Dos terceras partes de él son dios, [y] una tercera parte es humano” (Gallery Kovacs, 2016).
En la Epopeya, Gilgamesh es retratado como un rey tiránico y opresor hacia sus súbditos. Los dioses, en respuesta, crean a Enkidu, un salvaje hombre del desierto, como contraparte y rival de Gilgamesh. Luego de una épica batalla entre ambos, se transforman en grandes amigos y compañeros de aventuras (Gallery Kovacs, 2016).
Juntos, enfrentan diversos desafíos, incluyendo la muerte de Enkidu a manos de los dioses. Esto lleva a Gilgamesh a emprender la búsqueda de la inmortalidad, en un recorrido que incluye grandes peligros y revelaciones. Finalmente, este semi-dios mortal acepta su destino humano común, pero se consagra como uno de los reyes más famosos y venerados de la antigua Mesopotamia (Gallery Kovacs, 2016).
El poema inmortaliza así las hazañas y la personalidad de Gilgamesh. En palabras del propio poema: “Él vio lo profundo, descubrió lo oculto, trayendo una larga historia del tiempo antes del diluvio. Viajó lejos en el camino, agotado y cansado de escribir, grabó en una tabla de piedra” (Gallery Kovacs, 2016).
¿Existió realmente Gilgamesh?
Según diversos estudios, se ha confirmado la existencia real de Gilgamesh como rey de la ciudad sumeria de Uruk entre el 2.700 y 2.600 a.C, durante la primera dinastía documentada de esa ciudad. Los historiadores han hallado inscripciones en las que se menciona a Gilgamesh como monarca, validando su paso histórico como gobernante en la antigua Mesopotamia (González Grueso, 2020).
Si bien la Epopeya presenta fantásticas exageraciones sobre las hazañas del Rey de Uruk, se cree que el poema se basa en la vida de un personaje real convertido luego en figura legendaria. Incluso se han identificado posibles lugares de enterramiento tanto del propio Gilgamesh como de su rival y luego amigo, Enkidu (González Grueso, 2020).
Un claro indicio de su existencia son las numerosas historias, mitos y leyendas protagonizadas por Gilgamesh que han aparecido en excavaciones arqueológicas en toda Mesopotamia. El pueblo sumerio narró oralmente estas historias durante siglos antes de que fueran recopiladas en su versión escrita conocida actualmente (González Grueso, 2020).
Por lo tanto, los eruditos coinciden mayoritariamente en que detrás del mítico Rey de Uruk se encuentra un antiguo gobernante real de esa ciudad, que luego fue envuelto en exageradas narraciones sobre sus logros y su búsqueda de la gloria eterna. La Epopeya de Gilgamesh se sustenta así en la vida de un personaje real convertido en arquetipo heroico (González Grueso, 2020).
Gilgamesh: el héroe que desafió al tiempo
Más allá de su existencia como monarca real en la antigua Mesopotamia, la figura de Gilgamesh y su epopeya trascendieron su propio tiempo y espacio, convirtiéndose en un referente cultural que influenciaría profundamente la historia posterior de la humanidad (García Jiménez, 2020).
En primer lugar, se le considera el prototipo del héroe en la literatura universal por sus extraordinarias hazañas y la búsqueda de superar los límites de la condición humana. Sus aventuras sentaron las bases para el género épico, inspirado después en figuras legendarias como Ulises, Eneas y tantos otros héroes míticos (García Jiménez, 2020).
Asimismo, el poema constituye uno de los primeros testimonios conocidos de la literatura universal sobre los grandes cuestionamientos existenciales que acompañarían el pensamiento humano para siempre: el sentido de la vida, el dolor, la amistad y el deseo de trascendencia (García Jiménez, 2020).
Por último, la Epopeya de Gilgamesh ofrece un invaluable documento histórico sobre las creencias, costumbres y ritos de las primeras civilizaciones urbanas conocidas. Sus versos arrojan luz sobre momentos fundacionales no solo de la cultura mesopotámica, sino de la organización social y política de la humanidad.
De este modo, la figura legendaria de Gilgamesh sobrepasó las fronteras de su ciudad y la memoria de su pueblo, para consagrarse como un icono de referencia histórica mundial (García Jiménez, 2020).
Referencias
Abusch, T. (2001). The Development and Meaning of the Epic of Gilgamesh: An Interpretive Essay. Vol. 121, No. 4 , 614-622.
Anonimo. (2016). La leyenda de Gilgamesh. Mexico: Obras clasicas de siempre. Obtenido de La leyenda de Gil: http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx/Colecciones/ObrasClasicas/_docs/Gilgamesh.pdf
Gallery Kovacs, M. (2016). The Epic of Gilgamesh. California: GRI Library Catalog.
García Jiménez, G. (1 de Abril de 2020). Despertaferro-ediciones. Obtenido de Gilgamesh, el héroe que venció a la muerte: https://www.despertaferro-ediciones.com/2020/epopeya-de-gilgamesh-el-heroe-que-vencio-a-la-muerte/
González Grueso, F. D. (6 de Mayo de 2020). Cervantes virtual. Obtenido de Gilgamesh, un estudio antropológico cultural y literario del primer héroe.: https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/gilgamesh-un-estudio-antropologico-cultural-y-literario-del-primer-heroe-784159/html/