Artículo de información
José Carlos Botto Cayo y Abel Marcial Oruna Rodríguez
29 de agosto del 2023
El quechua es una de las lenguas indígenas de mayor vigencia e importancia en Sudamérica. Se extiende principalmente por la región andina, en países como Perú, Ecuador, Bolivia y el noroeste de Argentina. Pese a los intentos de erradicación durante la colonia, el quechua sobrevivió y su influencia puede percibirse claramente en el español que se habla en estas zonas. Un rasgo distintivo de este español americano es la presencia de “quechuismos”, un conjunto de palabras provenientes del quechua que se han incorporado al uso cotidiano.
Este artículo se centrará en analizar en detalle el fenómeno de los quechuismos, examinando sus orígenes, significados, pronunciación y evolución. Se presentarán numerosos ejemplos de quechuismos ampliamente difundidos, como “cancha”, “llama”, “cóndor” o “guagua”, vocabularyo que los hablantes emplean a diario, muchas veces sin ser conscientes de su raíz quechua. Asimismo, se considerará cómo se alteró la pronunciación original de algunos términos al adoptarse en español. Más allá del valor lingüístico de los préstamos léxicos, los quechuismos dan cuenta de la pervivencia de la cultura e idiosincrasia andina, que dejó una impronta indeleble en el castellano americano.
El idioma de los Andes que sobrevivió desde los Incas
El Quechua es una lengua que se originó en la región del Cusco, Perú, durante el apogeo del Imperio Incaico en el siglo XV. Con la expansión de los Incas, el Quechua se extendió como lengua franca por toda la cordillera de los Andes, llegando hasta Ecuador, Colombia, Bolivia, Chile y Argentina. Se estima que en la actualidad hay alrededor de 10 millones de personas que aún hablan Quechua en sus distintas variantes regionales (Pérez Porto, 2013).
El Quechua tiene una compleja morfología aglutinante, con abundantes sufijos y prefijos que permiten modificar el significado de las palabras. Asimismo, posee una rica tradición oral que se remonta a los tiempos prehispánicos. A pesar de los intentos de los conquistadores españoles por erradicarla, el Quechua logró sobrevivir y conservarse como patrimonio cultural de los pueblos andinos. Incluso ha influenciado al español con numerosos préstamos léxicos como “pampa”, “cóndor”, “papa” o “guano” (Pérez Porto, 2013).
El quechuismo
El quechua ha influido profundamente en el español que hablamos hoy en día en América Latina. Son muchísimos los quechuismos o palabras de origen quechua que se han incorporado a nuestro idioma y que utilizamos de forma natural en la comunicación diaria, sin si quiera percatarnos de su procedencia ancestral. Expresiones tan comunes como “choclo”, “cóndor”, “guagua”, “llama”, “pampa” o “papa” provienen originalmente del lenguaje de los incas (Andes, 2014).
Resulta difícil imaginar cómo sería el español actual sin la gran cantidad de préstamos léxicos tomados del idioma quechua. No podríamos referirnos a animales, plantas y accidentes geográficos que forman parte fundamental de nuestro continente sin el uso de esos términos heredados de los pobladores originarios de los Andes. Más allá de su incorporación natural a nuestro léxico, los quechuismos nos vinculan directamente con el pasado precolombino y la lengua franca del Tahuantinsuyo. Cuando empleamos palabras como “vicuña”, “guano” o “puna” estamos activando un vínculo lingüístico ancestral con raíces en la cultura quechua (Andes, 2014).
La integración de numerosos quechuismos en el español contemporáneo pone de manifiesto la persistencia histórica del quechua y su continua influencia en dicho idioma, no obstante los intentos de erradicación que ha enfrentado. El empleo habitual de estos términos provenientes de la lengua franca incaica constituye un vestigio del legado cultural y lingüístico de las civilizaciones autóctonas de los Andes, el cual permanece vigente a través de su manifestación en el léxico de uso corriente (Andes, 2014).
Quechuismos en el castellano de Moyobamba
El castellano hablado en Moyobamba, ciudad ubicada en la selva norte del Perú, presenta una notable influencia léxica y gramatical del quechua. Esto se debe al contacto histórico entre ambas lenguas durante la época colonial, cuando los conquistadores españoles llegaron a territorios donde se hablaba quechua y aimara (Alvarado, 2017).
En el castellano de Moyobamba se encuentran numerosos quechuismos o préstamos del quechua, especialmente en el vocabulario referido a la flora, fauna y geografía local. Abundan los nombres y adjetivos quechuas como “inchi” (maní), “pupo” (ombligo), “buchisapa” (barrigón). También se hallan verbos quechuas (“micuy” por comer), adverbios (“chuya chuya” por muy limpio) e híbridos con raíz quechua y sufijos españoles (“ishpatero” por persona que orina mucho) (Alvarado, 2017).
Además de los quechuismos léxicos, en el habla de Moyobamba se perciben rasgos gramaticales propios del sustrato quechua, como la discordancia de género. En definitiva, el castellano amazónico de esta zona muestra una impronta quechua tanto en su vocabulario como en ciertas estructuras, reafirmando la historicidad del contacto lingüístico (Alvarado, 2017).
Quechuismos generales
El quechua ha influido notablemente en el español hablado en Perú y otros países andinos. Una muestra de ello son los numerosos quechuismos o préstamos léxicos de dicha lengua que se han integrado al castellano. Entre los ejemplos más conocidos se encuentran “papa”, “cóndor”, “llama”, “puna” o “guagua”. Estas voces provienen originalmente del quechua y con el tiempo pasaron a formar parte del idioma españolamericano (ChugoX, 2019).
Otros quechuismos lexicalizados en el español peruano son “choclo” (mazorca de maíz), “achira” (raíz comestible), “guano” (excremento de aves marinas) o “pichana” (corte de carne vacuna). En muchos casos, los hispanohablantes ni siquiera son conscientes del origen quechua de dichos términos, tan incorporados están a su léxico cotidiano (ChugoX, 2019).
Además de préstamos léxicos, el contacto prolongado entre el quechua y el castellano generó transferencias gramaticales y fonéticas en el español andino. Un ejemplo es el uso del posesivo pospuesto al sustantivo, como en “el libro mío” en lugar de “mi libro”. Asimismo, se dan fenómenos como el yeísmo o el seseo, influidos por la fonética quechua (ChugoX, 2019).
En síntesis, la impronta del quechua en el castellano andino abarca varios niveles lingüísticos. Los quechuismos léxicos son solo la manifestación más evidente de este contacto, que también se extiende a la gramática, la pronunciación y la entonación. Ello enriquece el español peruano y refleja la compleja historia de convivencia entre ambas lenguas (ChugoX, 2019).
Referencias
Alvarado, L. (21 de Mayo de 2017). Mi universo lingüístico . Obtenido de Quechuismos en el español amazónico de Moyobamba: http://universo-linguistico2.blogspot.com/2008/03/quechuismos-en-el-espaol-amaznico-de.html
Andes, L. (6 de Mayo de 2014). Los Andes. Obtenido de 75 quechuismos forman parte del idioma español: https://www.losandes.com.pe/oweb/Nacional/20140506/80003.html
ChugoX, H. (19 de Setiembre de 2019). Hugox. Obtenido de Clases de gramática con Hugox : https://www.youtube.com/watch?v=UPvgl0KVWic
Pérez Porto, J. G. (10 de Octubre de 2013). Definicion. Obtenido de Definición de quechua: https://definicion.de/quechua/